‘Hits’ es el espectáculo con el que se despide el grupo Tricicle, tras cuarenta años compartiendo
escenarios. El show recoge los sketches más famosos y aclamados por el público. Los miembros del
grupo tienen claro que no es una verdadera despedida. Joan Gracia, Paco Mir y Carlos Sans afirman
que no abandonarán del todo el mundo del espectáculo y continuarán como productores y directores
en diferentes montajes.
El pasado viernes 6 de marzo el Coliseum de Barcelona estaba lleno, pero no hasta los topes. La
nueva moda de vender palomitas también en el teatro hacía que dos de cada tres espectadores se
sentaran con su cucurucho lleno hasta arriba y se creara un murmullo crepitante y olor a tostado.
Entre las escenas que destacaron estaban la de la Prehistoria, la del hospital, la del famoso
aeropuerto o la del casting. Varias veces pidieron un voluntario del público y, mientras un par de
focos blancos recorrían el oscuro de la sala para buscar al elegido o elegida, los cómicos se situaban
estratégicamente entre las butacas, resultando voluntarios de su propio espectáculo. Esta situación,
que generaba primero una mezcla de adrenalina y ansiedad en los espectadores, se disipaba luego al
entender la broma y, al relajarse, había una tendencia general a encontrar con más facilidad la risa
en el siguiente sketch.
Como expertos en teatro gestual hablaron poco, tampoco hacia falta. En su lugar una voz en off
explicaba de vez en cuando alguna cosa en catalán, para los catalanes de la sala. Demostraron
sobradamente su experiencia en el teatro del gesto, especialmente cuando Joan Gracia, en uno de
los últimos sketches, en el que una maleta se quedaba atascada en el aire, sorprendió al público
creando la ilusión de que el objeto realmente no podía moverse de su sitio.
Las risas fueron en general bastante regulares, el público estaba disfrutando, incluso cuando dos
miembros del grupo bajaron a la platea a repartir la prensa local lanzando, con fingida pero
contundente mala leche, los periódicos a los desconcertados espectadores.
Sin embargo el espectáculo estaba claramente enfocado a una audiencia regular y conocedora de
las escenas escogidas, las bromas y el humor del grupo. El público no fue a ver un nuevo
espectáculo, no esperaba sorprenderse. Fue a recordar las risas de antaño y el disfrute pasado de
cuarenta años que ahora Tricicle había resumido en una hora y media. Muchos sketches habían
sido modernizados. Aparecían teléfonos móviles o el WhatsApp, e incluso la canción de Despacito.
Sin embargo, en una de las escenas del hospital, el mismo Joan Gracia, representando al paciente,
hace un ademán de tocarle el culo a la enfermera mientras esta sale de escena. A pesar de las risas
que suscitó el gesto, es este un humor un tanto anticuado a estas alturas, y más cuando vivimos en
una sociedad cada vez más concienciada con este tipo de temas y en medio de una cuarta ola
feminista.
Fue un espectáculo para nostálgicos, para quienes no iban a sorprenderse sino a recordar. Algunos
nos preguntamos por qué no decidieron montar un último e innovador show en vez de reciclar los
pasados y vivir de las rentas los cuatro años que ‘Hits’ lleva en los escenarios. Una cosa está clara,
los teatros siguen llenándose por un nombre que también llenó de risas el pasado.